'Batman. La serie animada'. "La gata y la garra: Parte 1"

Una enorme luna de sangre se alza entre los rascacielos gothamitas. Amparada por las sombras, una misteriosa figura trepa con pasmosa agilidad las verticales paredes de un rascacielos. 

La gata que trepó el muro.

Con un golpe de látigo y un par de movimientos dignos de una pantera, la figura cubierta de cuero negro se sitúa frente a una de las ventanas y observa con avidez su brillante y valioso objetivo: un deslumbrante collar de perlas con varias gemas engarzadas. Utilizando una de sus afiladas garras cual corta-vidrios con punta de diamante, Catwoman –como deduzco ya habréis adivinado- abre un orificio perfectamente circular en una de las ventanas e invita a Isis (una pequeña gata negra, hasta ahora enrollada en su cuello) a hacerse con el jugoso premio.

No hay ventana que la detenga.

Hecho el trabajo, sin más dilación, la mujer gato y su pequeña acompañante huyen del lugar, sin tan siquiera percatarse que el hombre murciélago ha actuado como sigiloso espectador de toda la acción desde las alturas. Al salir éste a su encuentro e intentar detenerla, se inicia una vertiginosa persecución que no dejará azotea de Gotham sin explorar. En última instancia, y para sorpresa de Catwoman, el enmascarado salva a Isis de morir atropellada por un camión, dejando clara una vez más la  inalterable buena voluntad de nuestro héroe. En este punto parece que Batman se ha dado por vencido y deja huir a Catwoman. Nada más lejos de la realidad, el vigilante se ha hecho con una muestra de ADN que sin duda lo ayudará a dar con la identidad de la misteriosa mujer gato.

Bats no te lo va a poner tan fácil, gatita...

Nuestro héroe, obligado también a cumplir con sus obligaciones como Bruce Wayne, acude a una subasta benéfica de solteros en la que él es, sin duda alguna, la ‘presa’ más codiciada. Tras varias pujas, una desconocida se hace con el ‘premio’ poniendo una gran suma de dinero en juego. Se trata de la bella rubia de ojos verdes Selina Kyle, y aunque Bruce desconoce la concordancia entre la muchacha y su felino alter ego, algo parece descongelarse en el pecho de nuestro compañero de fatigas. Incluso presenciaremos un acontecimiento inédito, Wayne se sonroja con ciertos comentarios de la Sta. Kyle.

¿Se habrá enamorado el soltero de oro de Gotham?

Parece ser que ésta ha pujado tan solo para colaborar con el objetivo del acto benéfico, que no es otro que la ayuda a sociedades protectoras de los animales, pero aún así accede a tener su merecida (y costosa) cita con Bruce Wayne.

Citas aparte, el velo de la noche cae irremediablemente sobre Gotham con sus más dramáticas consecuencias. Una vertiginosa persecución de automóviles entre la policía y un abultado grupo de malhechores llena las calles de alaridos, disparos y derrapes. Tras varios minutos de pánico, Batman logra detener la anarquía desatada. Una vez detenidos los maleantes, Gordon informa a nuestro héroe que los villanos forman parte de la organización terrorista de Garra Roja y su intención era hacerse con una gran cantidad de armas. ¿Estará en Gotham la temida criminal? En caso afirmativo, ¿cuáles serán los intereses que la han llevado a visitar la ya tan sufrida ciudad?

Batman, siempre dispuesto a echar una mano... o un puño.

Gordon tiene malas noticias.

A la mañana siguiente, con Bruce ya en su apartamento, Selina Kyle (muy impresionada con Batman, pero nada en absoluto con el Sr. Wayne) recibe una mala noticia. Los terrenos donde planeaba construir una reserva para los leones de montaña han sido finalmente vendidos a la empresa MULTIGON INTERNATIONAL,  destruyendo de un plumazo su ecologista proyecto. Ni corto ni perezoso, Bruce Wayne mueve algunos hilos para concertar una entrevista entre el director de dicha empresa y la más que enojada Sta. Kyle. Tras una poco fructífera reunión, estando ya a solas el directivo de M.I., se nos descubre la terrible realidad. Garra Roja, que para sorpresa de muchos es una hermosa a la par que despiadada mujer, está detrás de la compra de los terrenos. ¿Su interés oculto? unas instalaciones militares ocultas bajo tierra en esa zona.

Garra Roja tiene intenciones de 'arañar' Gotham

La cosa no quedará así. Si bien como Selina Kyle le puede resultar difícil llegar al quid de la cuestión, para Catwoman ya es otro cantar. Mientras Batman vapulea al capo de la mafia, intentando averiguar más detalles sobre la presencia de Garra Roja en Gotham, Catwoman, amparada  en todo momento por las sombras nocturnas, regresa a las oficinas de MULTIGON INTERNATIONAL con la esperanza de hallar pruebas que demuestren su pálpito: que ni la operación de compra ni la empresa que la realiza, son en absoluto trigo limpio.

Catwoman al más puro estilo 007

Los métodos del murciélago son directos e infalibles

Todo parece ir rodado mientras la gata fotografía documentos que demostrarían su corazonada, pero nada más lejos de la realidad. Mientras Catwoman actúa ajena a todo, Garra Roja y sus secuaces no se pierden detalle de los furtivos acontecimientos a través de un oculto canal cerrado de vigilancia.

Selina e Isis no están tan a solas como creían

¿Logrará Catwoman escapar con sus siete vidas intactas?

En menos de un periquete, varios miembros del malvado ‘club’ de Garra Roja irrumpen en la estancia, pero la gata ya ha huido a través del sistema de ventilación del edificio. Tras una breve persecución Catwoman logra escapar del rascacielos, pero obviamente no va ser tan sencillo. La mujer de negro se ve abocada al vacío que la separa del duro asfalto por culpa de un disparo de la terrorista carmesí. Cuando todo parece ya perdido, el héroe enmascarado la rescata en pleno vuelo, recibiendo en señal de agradecimiento un apasionado beso que lo desconcierta una vez más.

Pareja de altos vuelos.

La Gata no se anda con rodeos, para sorpresa de Bats.

Como no todo va a ser romanticismo (y menos entre la noctámbula pareja), Catwoman se deshace hábilmente de Batman y huye una vez más, dejando a éste con una promesa en los labios: La próxima vez que sus caminos se crucen, la detendrá sin que le tiemble el pulso en absoluto.

Cuando todo parece haber acabado por esa noche, con Selina ya en casa, descubrimos que ésta no va a estar a salvo ni siquiera en su santuario. Los terroristas han averiguado donde cuelga el látigo por las noches y la tienen bajo vigilancia constante.

Selina Kyle es observada en todo momento

OPINIÓN:

En esta ocasión, me voy a tomar la libertad de procrastinar el análisis sobre la trayectoria como personaje de Selina Kyle/Catwoman  hasta la reseña de la parte 2 de la historia (más que nada, porque si ahora suelto toda la parrafada, poco o nada me va a quedar para luego. No soy bueno haciendo particiones y gusto en dejar lo bueno para el final).

Así pues, seré breve. En este episodio ya observamos cierta complejidad argumental, que no hará más que irse acentuando exponencialmente a lo largo de la serie. De este modo, el episodio se nos presenta de lo más interesante, manteniéndonos en vilo a lo largo de todo su metraje (que no es demasiado, la verdad sea dicha de antemano). Lejos de evolucionar hacia un tono más acorde a los shows de animación infantiles, observamos cómo asoman la nariz temas adultos y sumamente interesantes tales como tramas terroristas, tintes ecologistas, un incipiente feminismo (observamos dos claros casos de ‘Girl Power’: Catwoman y Garra Roja, ambas mujeres fuertes con poca necesidad de ayuda masculina), espionaje y las primeras muestras de un tórrido romance. Y no un romance cualquiera, sino uno lleno de matices, sensualidad,  de idas y venidas. Un romance tormentoso entre la mujer gato y el hombre murciélago que, ya desde su primer escarceo, no dejará impasible a ninguno de nosotros. Observaremos como Batman, a pesar de una más que férrea convicción y un inamovible enfoque hacia su objetivo único (la justicia), temblará hasta los cimientos una y mil veces, al siempre hipnótico ritmo del contoneo de caderas de uno de los más claros ejemplos de sensualidad (y sexualidad), ambigüedad y óptimo uso de las armas de mujer que veremos en el universo de Gotham, nuestra querida Selina Kyle. Nuestra deseada CATWOMAN.

En breve continuaremos con el episodio:  “LA GATA Y LA GARRA: PARTE 2”

Fecha de la primera emisión en U.S.A: 05/09/1992

Título Original: “The Cat and the Claw: Part 1”

Guión: Sean Catherine Derek, Laren Bright
Dirección: Kevin Altieri