Harley Quinn #3

Calificación:

Quizás lo idóneo hubiese sido publicar esta reseña en el día de San Valentín, ya que se trata de una historia especial para leer en el Día de los Enamorados. Pero como se suele decir en estos casos, ese día se me olvidó echarme novia y Cupido estaba muy ocupado con sus flechas en otra parte.

Ay, el amor. A veces tan dulce y en ocasiones tan amargo. Nuestra Harley bien lo sabe, la pobre muchacha. Su querido Mistah J. no le hace el menor caso y ella se siente más sola que Judas en el Día del Amigo, que ya es mucho decir. Yo la comprendo muy bien. Se cómo se siente ella al pasear por la calle y ver a todas esas jóvenes y atontolinadas parejitas cogidas de la mano y dándose besitos en el piquito como los periquitos. Es repugnante. Si, así es. Al menos eso es lo que piensa ella, y así lo podemos ver en las primeras páginas de este tercer número de su serie que está guionizado por la feliz pareja de enamorados Jimmy Palmiotti y Amanda Conner.

En anteriores números ya pudimos atisbar los golpes de suerte que irrumpían inesperadamente en la vida de Harley. Hagamos un breve repaso: primero hereda por parte de uno de sus pacientes en Arkham un valioso edificio de apartamentos, a raíz de ésto decide mudarse y conoce a nuevos amigos (incluso alguno peludito y a cuatro patas) y encuentra no uno, sino dos empleos con los que podrá pagar la renta.

Dicho así, a nuestra protagonista aparentemente le van muy bien las cosas. Pero es cierto eso que dicen que no se puede tener todo en esta vida, y Harleen Quinzel es desafortunada en el amor, de ahí su actitud desafiante hacia los tortolitos. Y aunque a mí, como Quinnlover que soy, esta chica me resulte arrebatadoramente sexy y adorable, para el común denominador de los mortales que pululan por ahí, su mentalidad extrema y psicótica suelen parecerles rasgos nada apetecibles y terminan por darse el piro. En fin, ellos se lo pierden...

Sin conocimiento alguno del paradero del Joker, la pelirroja echa de menos a alguien que la adore y la quiera de verdad por ser tal y como es. Se siente triste y estaría dispuesta a entregarse a cualquiera que se fije en ella. Quinn parece haberse encariñado de su nuevo amigo y vecino (Spiderm...ay no, que no es éste) Big Tony, pero nada hace pensar que esa relación llegue a buen puerto...¿quizás en un futuro incierto?

De todas formas son las pequeñas acciones, los actos más insignificantes, los que hacen que el día a día de una persona cambie de forma radical. Y de manera fortuita, algo mágico por decirlo de algún modo y fuera de control, irrumpe en la vida de Harley convirtiéndola en la chica más deseada de Coney Island. Lo que ocurre, es que en realidad no es tan bueno como parece. Harley tendrá que recurrir a sus artes para quitarse de encima "literalmente" a toda la escoria que va tras ella como si fuera una perra en celo.

La estructura de la serie se mantiene firme con unos guiones propios de una sitcom animada. Existe, como es lógico, un hilo conductor que une las distintas tramas de cada número en una misma cronología, no obstante, el lector puede disfrutar de cada entrega como si de una historia aparte se tratase. En cada número acompañaremos a Harley en otra de sus alocadas aventuras en las que al final, todo se resuelve y vuelve a ser como al principio. Bueno, o casi.

Hasta ahora no había reparado en hablaros de las maravillosas portadas de esta colección en manos de la artista Amanda Conner. Y si, maravillosas es el adjetivo que creo que mejor las definen. Es increíble la expresividad que trasladan sus ilustraciones, pero de alguien con su talento, nunca me espero menos.

No sabría como explicaros de forma ordenada y resumida mi visión general de este cómic, así que para terminar esta reseña, soltaré a vuelapluma unos cuantos pensamientos en ebullición: una historia simple y eficaz...muy divertida...como un corto del Coyote y el Correcaminos...un cómic sexy...caerás enamorado de ella.

We love ya HARLEY!

• Créditos

EDICIÓN ORIGINAL: Harley Quinn #3 USA
FECHA DE PUBLICACIÓN EN USA: Febrero de 2013
GUIÓN: Amanda Conner, Jimmy Palmiotti
DIBUJO: Chad Hardin